El estudio Kobold sobre «Hábitos de los españoles en materia de limpieza del hogar» señala que en nuestro país un 12% de la población se define como «perfeccionista de la limpieza» frente a un 71% que afirma «esforzarse bastante» para que su vivienda esté limpia.
Además, existe un mayor número de mujeres que se consideran perfeccionistas (15%) que hombres (8%). El estudio informa que las mujeres son responsables principales de las tareas del hogar en un 73%, mientras que el hombre es responsable únicamente en un 37% de los casos.
Un 33% de los encuestados aseguró ser «regular» en la limpieza de su hogar, un 12% de la muestra se declaró «maniático de la limpieza». Un 73% de encuestados, a pesar de no considerarse a ellos como tal, señala que en su entorno si hay personas maniáticas.
Entre las tareas más comunes de limpieza destaca el uso del aspirador, ya que un 66% de los encuestados asegura aspirar entre una y tres veces a la semana frente al 6% que lo hace de forma regular todos los días.
Son las mujeres quienes se muestran, mucho más estrictas con el empleo de utensilios de limpieza. Un 90% de encuestados afirman que los utensilios de limpieza que más utilizan son la fregona y la escoba.
El 80% de la muestra usa la aspiradora, mientras que el plumero es utilizado por más de la mitad de la población. Un 33% utiliza un aparato distinto para cada superficie y un 27% usa productos de limpieza específicos para alérgicos o para hogares con mascota.
Una vez terminada la limpieza un 26% volvería a sacar el sistema adecuado para limpiar la suciedad olvidada, pero un 69% lo limpiaría con cualquier otro utensilio.
En cuanto a la limpieza del colchón, un 39% de los españoles nunca ha limpiado su colchón, en la mayoría de los casos por desconocimiento. Sin embargo, con respecto a las cortinas un 94% afirma limpiarlas como mínimo una vez al año.
Los encuestados señalan que los cristales y espejos también se limpian con frecuencia, es decir, una o dos veces al mes, mientras los segundos se limpian todas las semanas.
Un 45% de encuestados españoles afirma limpiar con más frecuencia en primavera y verano, mientras que un 11% asegura dedicarse a las tareas de limpieza en invierno.
Por zonas geográficas, el estudio informa que los madrileños son los más organizados, ya que limpian sus hogares los mismos días de la semana. Sin embargo, el Levante dedica su tiempo a la limpieza en función de las circunstancias personales diarias.
Los andaluces se definen como «maniáticos de la limpieza» y admiten conocer a más personas perfeccionistas en su entorno.
Los catalanes y madrileños son especialistas en la limpieza frente alérgenos y restos de mascotas.
La zona centro (con Castilla-La Mancha, Madrid y Castilla y León), Levante (con la Comunidad Valenciana y Murcia) y Sur (con Andalucía, Badajoz, Ceuta y Melilla) sobresale por su empleo de aparatos de limpieza especiales para cada una de las superficies, ya sean acristaladas, lisas o textiles.
¿Por qué es importante la limpieza?
Los expertos explican que el orden nos proporciona bienestar emocional, porque nos produce calma y paz. Realizar las tareas nos genera una sensación de control, eliminando todo aquello que ya no necesitamos y quedándonos con las objetos que son importantes.
Varios estudios han comprobado que el orden y la limpieza favorecen la liberación de endorfinas, unas hormonas que ayudan a reducir el dolor y se las conoce como las hormonas de la felicidad.
Las personas que viven en entornos desordenados suelen presentar niveles más altos de cortisol, la hormona que se libera como respuesta al estrés.
«A ello hay que añadir que el caos atrae más caos. Un espacio desordenado o la falta de higiene en casa nos estorban y suponen una carga mental, una distracción que nos impide desconectar y un incordio cuando, por ejemplo, intentas encontrar algo sin éxito por culpa del desorden. Ese descontrol nos pone más nerviosos, por lo que ponerle remedio nos transmite tranquilidad», informa el diario La Vanguardia.
La limpieza no tiene que generar estrés. Los profesionales de Servinet del Vallés explican que lo mejor es comenzar por la cocina y el baño, ya que son las zonas que requieren más tiempo, dejando el salón para el final.
Realiza las tareas con tranquilidad y sin prisas, poniendo un poco de música relajante y abriendo las ventanas para disfrutar de la energía solar.
Si quieres mantener el orden debes tener en cuenta algunas recomendaciones como nunca irse a dormir sin haber fregado los platos o recogido el salón.
El movimiento cleanfulness consistente en apostar por el orden y la limpieza para calmar la mente, sobre todo cuando intentas centrarte en alguna actividad. Muchas personas emplean el orden como terapia para reducir el estrés.