Actualmente, si hablas de fibra nadie te hará una analogía alimentaria o referirá la palabra integral. Hoy, hablar de fibra es hablar de tecnología, internet, futuro, conexión o velocidad. Nada de referencias a una alimentación sana.
Inevitablemente, hablar de fibra te conduce a hablar de ADSL, máxime cuando estás buscando una conexión a internet. Para los más profanos y profanas en el medio, aquellos a los que nos resulta indiferente si nuestra conexión a internet llega por uno u otro medio, va este post. Por si en algún momento de sus vidas, necesitan saber que diferencias existen entre ambas.
Cuando no se conoce el medio, lo mejor es preguntar, con mucho gusto los profesionales de Oroc han contestado a algunas preguntas. Hasta hace tan solo unos años, la oferta de internet era algo bastante exclusivo. Ha sido durante la última década, con la implantación de las redes de cobre o fibra, cuando internet se ha convertido en una necesidad.
Pero no vamos a debatir aquí sobre ese aspecto. Internet se ha convertido en una herramienta utilizada para todo y gracias a la fibra o el ADSL, todos podemos disponer de ella. Bueno, gracias a la red y al wifi.
ADSL es…
El ADSL y mejor dejarlo así que dar su nombre completo, es la tecnología de conexión basada en la banda ancha, fabricada en cobre, que transmite los datos mediante señales eléctricas. Su llegada fue un gran avance, puesto que ofrecía una mayor velocidad en la transmisión de datos. Sobre todo en comparación con la línea de teléfono que se utilizaba entonces.
El ADSL abrió la posibilidad de la tarifa plana de internet y el internet para todos. Mejoraba notablemente todos los aspectos de este medio de comunicación. Se cambió el antiguo modem por el Reuter y acercó al planeta de forma irremediable.
La implantación del ADSL fue uno de los grandes avances de la tecnología. Entre sus ventajas destacaban la posibilidad de hacer uso simultáneo de voz y datos. Es decir, navegar por la red y hacer uso del teléfono al mismo tiempo. Si, esto que ahora hacemos de forma natural, hubo un tiempo en que era impensable.
Su implantación no requería de otra infraestructura diferente, podía usarse la misma línea telefónica (comparten cobre) y la velocidad de conexión era más rápida ya que no necesitaba hacer una llamada. Algunos no recordarán este pequeño detalle, pero es cierto que para conectarte a internet, tenías que marcar con el teléfono.
El ADSL aún está presente en muchos hogares, sus prestaciones no desmerecen totalmente, pero está claro que su sucesora la fibra, ofrece mucho más.
Qué es la fibra
Como ya he comentado, nadie va a ofrecerte un bol de muesli o una tostada integral, ni siquiera un kiwi, si pides fibra. La fibra óptica, ese es su verdadero nombre para ser justos, ofrece al usuario la velocidad que realmente contrata con su operadora de telefonía. Está compuesta por hilos de vidrio o plástico y opera con señales ópticas, lo que viene a ser señales lumínicas. Esto proporciona una mayor velocidad, que se aprecia sobre todo, a la hora de descargar archivos o navegar. Con la fibra óptica no se suele colgar la página.
Otra de sus ventajas, es que puedes disfrutar de todos los contenidos multimedia que desees sin miedo a perder la conexión. La fibra óptica ofrece más garantías, mejor rendimiento y gracias a ella, mejores precios en el mercado.
Quien da más
¿Cuál de las dos opciones es mejor? A priori, es obvio que la fibra óptica tiene muchas más ventajas, debido a la calidad de la transmisión. El ADSL cuenta con una ventaja que seguramente desaparecerá pronto: la infraestructura necesaria ya está instalada. En tanto que algunos lugares no cuentan todavía con la instalación de fibra en la zona, el ADSL al poder utilizar la misma red telefónica, cuenta con más cableado.
Podemos recalcar las ventajas de la fibra frente al ADSL:
- La velocidad de navegación que puedes contratar con la fibra, alcanza hasta el Gbps, eso ofrece una velocidad de descarga meteórica. Además no depende de lo cerca que se encuentre la instalación telefónica como en el caso del ADSL.
- Debido a los materiales con los que se fabrica la fibra, la calidad de la conexión es mucho más limpia.
- Gracias a que los megas que el usuario utiliza para navegar no varían en ningún momento, la estabilidad de la conexión es mucho mejor. La velocidad de bajada se mantendrá siempre.
- Su instalación es sencilla, por ser fabricada en materiales flexibles y ligeros que el ADSL, pueden adaptarse a cualquier conducto existente en la vivienda o el lugar donde se vaya a instalar.
- En el caso de que haya un fallo, que haberlos hay los, por muy maravilloso que sea todo, la avería puede monitorizarse y encontrarse el punto exacto donde se ha producido simplemente con el ordenador. Eso evita búsquedas infructuosas y obras innecesarias.
En cuanto a inconvenientes, la verdad es que existen pocos, por no decir ninguno. Frente al ADSL todo son ventajas. Lo único que podemos destacar de este último, es lo ya dicho, posee toda la infraestructura necesaria para prestar el servicio.
Pero hay que ser realistas, la fibra óptica llegó para quedarse y en cuanto alcance todo el territorio y pueda dar servicio en todos los rincones, el ADSL, será historia.
Mientras que el futuro de la fibra se augura prometedor. No se sabe aún que vendrá después de la fibra óptica. Hoy ya contamos con fibra simétrica y asimétrica, esto es que tiene una velocidad de subida y bajada constante para el primer caso; en el segundo, la asimetría está en que sube a una velocidad menor que la de bajada.
Todo apunta, debido a las últimas noticias, a que se mejorará más ostensiblemente la velocidad. Gracias al uso de materiales más flexibles, a la búsqueda de sustitos de la fibra de vidrio que abaraten los costes y al uso de una red óptica pasiva.
La GPON, desarrollada en el dos mil cuatro, está en la actualidad en el punto de mira para la evolución de la fibra óptica. Un paso más, junto con la tecnología 5G en el campo de las comunicaciones.